J.J. Vaquero aborda en sus monólogos sin rodeos y sin pelos en la lengua, su vida cotidiana. Desde su familia y amigos, hasta su trabajo o su di?a a di?a. Siempre desde su particular punto de vista.
A Vaquero la vida le hace «bulling» y nos lo demuestra en un amplio abanico de situaciones que van desde la relacio?n con sus hijas, hasta el funcionamiento del mando a distancia. Pero pese a todo, e?l siempre logra encontrar el lado co?mico de la vida y lo comparte con el pu?blico, con el que la sintoni?a empieza desde que se asoma al escenario.